Inteligencia artificial, nuevo ámbito en la competencia global  

P: ¿Te sientes inteligente?

R: Como IA (inteligencia artificial), no poseo emociones ni conciencia humanas, por lo que el concepto de sentirme inteligente no se aplica a mí. Soy un modelo de aprendizaje automático que se entrenó en un gran conjunto de datos de texto y se diseñó para generar texto similar al humano en función de la entrada que recibo. Mis habilidades se limitan al conocimiento en el que he sido entrenado y los algoritmos que utilizo para generar texto. No tengo experiencias ni sentimientos personales, solo respondo a los aportes que recibo en función de los patrones que he aprendido.

Este es un extracto de un diálogo (chat) efectuado hace pocos días con el programa de la compañía OpenAI y denominado chatGPT. La respuesta fue entregada por la “máquina”, un programa residente en la “nube” y con tiempos de respuesta menores a un segundo. Se efectuó en idioma inglés y su traducción al castellano se efectuó en forma casi instantánea con otro programa que utiliza inteligencia artificial (IA).

La inteligencia artificial, junto a otras tecnologías emergentes, están presentes en cada vez más áreas de actividad de las personas, gobiernos, economías e industrias, lo que ha llevado a algunos analistas a considerar la IA como parte de infraestructura crítica nacional que debe ser desarrollada y asegurada.

A nivel global, el dominio de estas tecnologías se ha incorporado como elemento central en el escenario de competencia hegemónica entre las grandes potencias mundiales y también en la competencia entre las grandes corporaciones tecnológicas (las denominadas big tech), con efectos geopolíticos, estratégicos, económicos y sociales que afectarán a todos los países.

En ese sentido, el poder de una nación actualmente no solo se define por el control de territorios, población, acceso a recursos naturales, disponibilidad de energía o la capacidad productiva, sino que a ello se agrega las capacidades de acceder en forma segura y libre a este tipo de tecnologías y mantener su capacidad de competir y desarrollarse. 

Desde el punto de vista de la Defensa y Seguridad, el acceso y aplicación de tecnologías avanzadas es fundamental para lograr eficacia en operaciones multidominio (en dominios físicos, tales como aire, tierra, mar y espacio; dominios lógicos, como el ciberespacio, y el dominio cognitivo o de información).

En este artículo revisaremos los conceptos de inteligencia artificial e inteligencia humana, áreas de aplicación de la IA, con énfasis en aspectos de Seguridad y Defensa, y los problemas que puede generar. Continuaremos con una mirada a los esfuerzos realizados por grandes potencias y corporaciones privadas para liderar en este nuevo escenario, y culminaremos revisando la aproximación de Chile como potencia intermedia en términos de política pública.

(CONTINÚA)

Cristian de la Maza Riquelme
Research Fellow AthenaLab
9 de febrero 2023