
Si queremos mejor seguridad y defensa, tenemos que invertir en ello, como también en las leyes que sean necesarias para que esa inversión sea efectiva. Si yo fuera un asesor de cualquier candidato, lo primero que estaría haciendo es ver de dónde se sacarán los presupuestos para realizar los programas respectivos.

Entre los potenciales aliados de Trump, se prevé que América Latina se convierta en una “prioridad para la política exterior de EE.UU.”. El tema fronterizo, la llegada de China, y la propagación del autoritarismo preocupan a Trump y a sus asesores más cercanos, pero ¿en qué términos se reactivarán los vínculos entre EE.UU. y América Latina?.

Dejando a un lado la política, Marco Rubio y Pete Hegseth deberían trabajar más en materia de políticas en el hemisferio occidental y convertir una relación de abandono en una de aprecio mutuo.